lunes, 16 de julio de 2012

Lupus

No os lo he dicho. Tengo lupus. Hace once años me lo diagnosticaron y durante este tiempo he ido pasando altibajos. Al principio la noticia cayó como una bomba, pero con el tiempo lo fui asimilando. Es importante decir que sólo me afecta a la piel, por lo que puedo llevar una vida más o menos normal. O eso creía. Con el embarazo lo pasamos muy mal porque no sabíamos si podía afectar a Iuri, por suerte no fue así y nació sano. Además los síntomas me desaparecieron. He pasado el embarazo y el verano siguiente sin ningún brote, hasta creí que había desaparecido, pero no ahora he vuelto a tener uno. Sé que no me puedo quejar, que podría ser peor, pero siento que nos afecta a los dos. Iuri tiene que pagar las consecuencias de tener una madre con lupus.... No podemos ir a la playa (vivimos a dos minutos de ella) porque no me puede tocar el sol, nos pasamos todo el día encerrados en casa, y ni siquiera podemos ir a pasear como hacíamos. En fin, que lo que yo creía que era casi una vida normal deja de serlo cuando afecta a una tercera persona. Es lo que hay.

jueves, 5 de julio de 2012

Vacaciones en familia

El día a día hace que nuestra familia pase poco tiempo junta. Los dos trabajamos e intentamos no depender de nadie a la hora de educar a nuestro hijo. Aún así muchas veces tenemos que echar mano de la abuela o la tía (cosa que a Iuri le encanta).Por ese motivo nos vamos turnando: cuando yo trabajo Víctor está con Iuri y a la inversa. Por eso las vacaciones eran tan esperadas.... Por fin íbamos a pasar tiempo de calidad y en cantidad juntos. Hemos estado quince días en la isla de Ibiza en  un apartamento. Ha sido genial. Víctor y Iuri han ido mañana y tarde a la playa donde yo me unía al atardecer (tengo alergia al sol). Los he visto reírse, jugar en la arena, dormir en el sofá.... Nos hemos metido debajo del riego automático, hemos ido a cenar, a pasear, hemos vagueado sin límite, en fin hemos disfrutado de nuestra compañía...
Iuri se atreve con todo: le encanta las olas, tirarse a la piscina, mojar las galletas en agua de mar para luego comérselas (y deben de estar buenas porque no ha habido forma humana de hacerle entender que no era muy normal).
El viaje en avión ha sido emocionante (el de ida, el de vuelta prefiero olvidarlo. Las turbulencias no son buenas para alguien que tiene pánico a volar), Iuri está literalmente obsesionado con los aviones y cuando vio que subíamos no cabía en si de contento. No se mareó ni cogió dolor de oídos que era lo que más me preocupaba.
En fin, un viaje para no olvidar.
Os quiero un montón a los dos.



domingo, 3 de junio de 2012

El salto a la cama

El otro día pensamos en desmontar la cuna. Al fin y al cabo, Iuri nunca la ha querido usar... Buscamos una cama grande y compramos una barrera. Cual fue nuestra sorpresa cuando Iuri exclamó "llit, dormir!!!!" y se acostó. Durmió toda la noche del tirón... Ahora cada día se va a su cama y hay noches que después se pasa a la nuestra y otras que no. Lo importante es que haya sido él el que ha decidido hacerlo y continuamos sin que la hora de ir a dormir sea un drama. Además cada noche me pide que le lea un cuento que trata sobre el cambio a la cama grande. Hemos conseguido que no sea un paso forzado y los únicos que lo echamos de menos somos nosotros, sobre todo el padre, que cada noche me tienta para irlo a buscar....



viernes, 1 de junio de 2012

Indignación

¿Cómo se puede permitir que hagan sufrir a una niña de doce años durante casi dos semanas? ¿Está la sanidad pública tan mal o es que ahora lo escudan todo bajo la excusa de los recortes? ¿Cómo puede un médico no visitar a una niña por que no es rentable para la seguridad pública? ¿Cómo puede, sin ni siquiera hacerle un chequeo, deducir que la niña tiene cuento porque tiene un examen? Parece un guión de una mala película  pero es real. Mi sobrina fue al médico hace casi dos semanas y el señor, por llamarlo de alguna manera, no la visitó por que como tenía un examen.... a lo mejor no había estudiado lo suficiente. Además  alegó que no era una niña rentable porque ya la habían operado dos veces....¿PERDÓN??????? En fin, la niña con unos ataques agudos de dolor acabó en el hospital, pero la cosa se complicó. Después de dos días en urgencias y de sentir por milésima vez que era una gastroenteritis la acabaron ingresando, pero siguió sin acabarse. Hemos sentido de todo, nos han dado un montón de posibles diagnósticos y al final once días después (tras arreglar la maquina de TAC que se había estropeado) le hacen una prueba de CINCO minutos y se dan cuenta que tiene una piedra encallada en la uretra. Yo no soy médico ni sé nada sobre el tema pero ¿no podrían haber empezado por eso? Si es la única prueba  que detecta todo, ¿para qué esperar? Y si la excusa es lo recortes, se hubieran ahorrado muchas pruebas y días de ingreso. Pero sobre todo se habrían ahorrado el ver una niña sufriendo durante doce días.... Lo dicho: estoy INDIGNADA.


sábado, 12 de mayo de 2012

Homeschooling

Navegando por Internet encuentras que hay un mundo más allá de lo que conocemos.... Estoy a la búsqueda y captura de materiales para afrontar los largos inviernos. El buen tiempo ha llegado y ahora no paramos en casa. Paseos a la playa: al aeródromo a ver a los paracaídas (a Iuri le encanta ver despegar y aterrizar aviones y los saltos); al parque: a las hípicas a ver caballos, etc. Por suerte podemos hacer todo eso sin salir de nuestro pueblo. Vivimos en una zona privilegiada. Pero, a lo que iba, el invierno es muy largo y he decidido preparar material y actividades para cuando llegue el frío. He encontrado varios blogs muy interesantes (ya os dejaré el enlace) que me han abierto los ojos. Entrando en páginas de homeschooling (familias que deciden educar en casa) he descubierto los lapbooks, las cajactivas, y muchos otros recursos desconocidos para mí. Así que, manos a la obra. Ya os explicaré.




miércoles, 9 de mayo de 2012

Relaciones familiares

Iuri es el pequeño de ocho primos... hace mucho que lo esperábamos pero no llegaba. Y los primos crecieron. Si hay algo que me apenaba era la diferencia de edad entre ellos. Al menos me quedaba una esperanza, ¡el séptimo y él sólo se llevarían dos meses! Pero nació y algo cambió... De repente los grandes se transformaron y pasaron de la frase: A mí no me gustan los bebés a la: Nunca he sido tan feliz, mis amigos me lo notan (va por tí Eduard). Le bastó conocer a su primo para al cabo de sólo CINCO días dedicarle un gol con una camiseta que él había hecho y en la que se podía leer:  PER A TU IURI. Sin palabras.... Han pasado los meses, y siguen igual. Montse lo quiere y lo cuida con gran cariño; Eduard se desvive por él y él lo adora y se deja querer; Pol y Unai más de lo mismo, ¡hasta le dan la comida!; Irene y Élia lo miman cuando se ven; y con Aniol crecen juntos y descubren poco a poco que sus caminos tienen mucho que ver....
Al fin y al cabo, las relaciones familiares son para toda la vida.

La elección del colegio

Qué fácil es opinar cuando no se tiene hijos.... Yo lo tenía claro, el día que tuviera uno iría a la escuela pública más cercana a casa. Pero algo ha cambiado. Iuri tiene 14 meses y desde los seis (no pude dejar de trabajar) va a la guardería pública del pueblo. Ninguna queja. Me encanta las instalaciones y las dos educadoras que tiene. Al principio le costó la adaptación, pero una vez superada (por ambas partes) es muy feliz y cuando llega se despide y empieza a jugar. No es nada traumático. Creo que es importante decir que sólo va tres horas por la mañana, la tarde es ,por ahora, para nosotros. En fin, que todo iba bien. Pero llega un día y me planteo el siguiente paso. ¿Realmente me gusta la escuela pública de ahora? ¿Es la misma a la que yo fui y de la que tantas veces he hablado bien? Respuesta no y no. No es culpa de los maestros, creo. Es culpa del sistema. Nuestra sociedad ha cambiado, vivo en el pueblo con más inmigrantes de Catalunya, y la escuela pública (por culpa de nuestros gobernantes) no ha podido utilizar esa diversidad de forma positiva. Cada vez hay más alumnos en clase y cada vez hay menos posibilidades de dar una educación individualizada. Se trata a los alumnos en bloque y no como individuos. Si llegas bien, y si no...
Plantearse la privada es difícil, ¡estamos en crisis! Y además no me gustaban las otras opciones que tenía al alcance. Escuela religiosa ¡Ni hablar!, la otra opción que me quedaba tampoco me gustaba.... Y de repente, aparece... ¡Van a construir un centro Montessori a diez minutos en coche de casa!. Había oído hablar del método en múltiples ocasiones (compartí piso de estudiantes con una maestra) y no me lo pensé: fui a la entrevista. Lo poco que me faltaba para decidirme se esfumó en aquel encuentro. Está decidido: Iuri empieza en el centro en septiembre. Espero haber hecho una buena elección y ver recompensados todos los esfuerzos que vamos a tener que hacer para que pueda disfrutar de una educación alternativa pero con muchos años de historia.